Estas cavernas tienen un alto valor cultural debido a que fueron utilizadas por los antiguos indÃgenas como lugares de entierros y como refugios durante sus jornadas diarias.
Esta caverna en su interior es frÃa, y profunda ya que a pesar de que se pueda entrar encorbados, llega un punto en el que es necesario arrastrarse para llegar a la siguiente cámara.
Cuentan que hay numerosas cuevas a lo largo de la orilla sur del Lago Alajuela a una altura de unos 100 metros sobre el nivel del mar. Generalmente son pequeños y poco profundas. No se tiene conocimiento exacto de la cantidad, principalmente por ser un área cuya geologÃa ha permitido la formación de estas cuevas.
Iniciamos nuestro recorrido muy temprano, encontrándonos con el investigador Christian Strassnig, quien serÃÂa nuestro guÃÂa y quien lleva a cabo un proyecto de turismo, arqueologÃÂa y desarrollo sostenible en áreas aledañas al Camino Real que empezó en mayo de 2008, y que pretende rastrear, georreferenciar y hacer prospecciones exploratorias del curso de esta ruta.
Mientras esperábamos nuestra piragua y nos ponÃÂamos los chalecos salvavidas, llegaron al puerto de Nuevo VigÃÂa dos individuos con una boa inmensa tratando de venderla al mejor postor, nos dio mucha lástima y vergüenza pues estaba maltratada y con varios golpes lo que hizo que algún compañero de la gira se atreviera a cargarla para tomarse alguna foto.
Luego de aproximadamente 20 minutos de paseo, viendo las avionetas que practicaban en el cielo, cercanas a Calzada Larga, nos bajamos en una orilla del lago y de inmediato nos explicaronàlo poco marcado que quedaba del antiguo camino, que con el oleaje del lago y la erosión ha ido perdiendo su marca. Allàpudimos ver que las piedras sobre el suelo fueron colocadas verticalmente formando una superficie plana y entre las piedras habÃÂa una solución sólida como cascajos o cemento que lo sostenÃÂa.
Nos fuimos por la misma senda del camino, en la vÃÂa marcada por aquellas rocas, mientras el guÃÂa nos contaba que en Calzada Larga hallaron un tramo, pero hace poco se cortó una calle y se destruyó mucho. A partir de allÃÂ, hacia la ciudad de Panamá, hay mucha intervención. Varios proyectos de construcción podrÃÂan destruir para siempre los tramos del Camino Real más cercanos a la ciudad, como ya pasó en partes del Corredor Norte y otras áreas.
Abordamos nuevamente la piragua y nos fuimos a otro borde del Camino Real, esta vez caminamos hasta la sombra de un árbol y allàtuvimos una muy entretenida clase de historia.
El camino tenÃÂa unos 80 kilómetros de distancia, 3 pies de ancho. En 1572 y en 1573, el famoso pirata Francis Drakeàsaqueó la población de Nombre de Dios y los españoles decidieron mover el puerto de Nombre de Dios a la fortificación deàPortobelo. De esta manera se tuvo que modificar el camino original en su paso por Boquerón.
La antigua Venta de Chagres es ahora una franja de tierra que permanece bajo el agua del lago casi todo el año, quedando expuesta únicamente al final de la temporada seca, para desaparecer otra vez en julio.
Supimos que bajo la vegetación, el suelo y el agua del lago se dan abundantes hallazgos precolombinos que revelan la vida de las poblaciones antes de la llegada de los españoles. Hay máquinas de moler y vasijas de cerámicas.
Caminamos por lo que serÃÂa otra parte del Camino Real, pero esta vez, cubierto por vegetación; casi ninguno de nosotros habÃÂa avistado un caimán que descansaba sobre un tronco en el lago, pero al ver el alboroto de la gente, el animal se fue.
Una vez en la piragua, fuimos directo a la comunidad de la Tranquilla, en donde nos recibieron con un almuerzo de dioses: almejas y arroz blanco, que nos llenó de contento al enterarnos de que aún no habÃÂa terminado la gira pues un grupo de jóvenes nos esperaba para ofrecernos un baile tÃÂpico que resultó muy agradable par cada uno de los espectadores.
Luego de reposar y disfrutar de la visita a esta comunidad, nos encaminamos en la piragua rumbo a las cuevas del lago Alajuela, toda una experiencia extrema. Al salir de las cuevas, fuimos alàAbrigo de Roca, un lugar mágico, lleno de misticismo en donde los antiguos pobladores se refugiaban y que poco a poco fue perdiendo su arco hasta formarse lo que queda hoy en dÃÂa.
Al salir de las cuevas nos subimos en las piraguas, por última vez en el recorrido y ya ÃÂbamos rumbo al puerto cuando en pleno lago Alajuela a un compañero se le cayó la zapatilla al lago y tuvimos que dar la vuelta para irla a buscar, por suerte la zapatilla flotó y la pudo rescatar, realmente fue muy gracioso.
Antes de irnos a la ciudad, visitamos el mirador de la represa Madden y pasamos un rato ameno.
Ojalá y todos estos esfuerzos no sean en vano y en un futuro no muy lejano se logre hacer del Camino Real un parque nacional o una reserva protegida.
Una guía de turismo ecológico en Panamá, dedicada a descubrir ríos, montañas, senderos y aventuras en la naturaleza. Ideal para los amantes del aire libre y la exploración rural.