Los Chorros de Olá, Coclé
diciembre 26, 2009 • Cerros y Montañas, Chorros y Cascadas, Coclé, Ríos, Vegetación • Comments
Después de una visita a Natá de los Caballeros, nuestro guÃa Fanshi, nos reveló que irÃamos a Los Chorros de Olá, dentro de Nuestro Amo, en Olá, provincia de Coclé.
La calle hace ya casi un año que está pavimentada, al contrario de algunas de estas fotos que fueron tomadas en el 2009 cuando el camino era de tierra y habÃa que pasar varias quebradas.
A lo lejos, más allá de los campos donde siembran la verdura, vislumbramos el chorro como un hilo que cae por el medio de las montañas; nos saludaron los trabajadores del arado con un “¡EJUE!†y levantaron sus brazos en señal de alegrÃa.
Hace unos años, el distrito de Olá era uno de los más pobres económicamente pero ha tenido un pequeño auge económica que ayuda a sus pobladores a seguir adelante. Es una de las regiones de Coclé con excelentes paisajes, abundante naturaleza y hospitalidad de la gente. Es uno de los de menor población y al estar ubicado en un área montañosa, su clima es muy agradable.
Avanzamos alegre y despreocupadamente por entre un paisaje de verdes fulgores y de pronto a nuestro lado estaba un toro echado cuidando sus señoras vacas, pero al ver bien a el toro, nos dimos cuenta de que estaba suelto y nos veÃa impasible, asà que aprovechamos y le sacamos algunas fotos procurando que estuviese bien sentado.
Un poco después Fanshi nos aviso de bajar y caminar. Seguimos la calle repleta de piedras con el sol estrepitoso, ya sentÃamos el chorro de cerca, lo sentÃamos encima, caminamos 15 minutos a paso lento, adelante nos encontramos con un poblador y nos contó que estas tierras están siendo vendidas y que son varios los proyectos que se perfilan realizar en esta zona de Olá con inversión extranjera.
Investigando en casa encontré que uno de estos es La Cascada con una extensión de 80 hectáreas de terreno donde se planea edificar “residencias de verano†en medio de la naturaleza y del campo donde cualquiera ama descansar.
El distrito de Olá espera que este desarrollo turÃstico sea destinado al beneficio de todos los moradores, muchos de los cuales se debaten en la pobreza, pues no es un secreto que el distrito de Olá es el que cuenta con mayor números de familias de extrema pobreza, existen muchos pueblos sin electricidad, sin agua potable y sin carreteras de penetración. Ya casi no quedan jóvenes en el pueblo pues emigran a la ciudad en busca de un futuro mejor. En este sentido, los pobladores cuentan con que estos proyectos que se están construyendo sea un puntal para que la gente de Olá se integre a un trabajo con el cual puedan sacar a sus familias adelante.
Sin embargo, las autoridades de Olá están a la espera que se les presenten los permisos necesarios en el municipio para estudiar el proyecto y conocer el tipo de construcción que se realizará en la zona. Lo primordial es que no se perjudique la naturaleza, pues toda construcción con los estudios de impacto ambiental y las normas legales que establecen las leyes panameñas puede desarrollarse dado que en esa forma no se atenta contra la seguridad ecológica de los pueblos, en especial de aquellos olvidados por los gobiernos. (2017 esto no ha quedado en nada)
Los chorros son producto de una depresión geográfica en donde se fraccionó la tierra creando asà el curso del rÃo de El Caño, en el cual caen tres hermosas cascadas.
Llegamos al espectáculo natural, “uno de los chorros más altos de Panamá registrado y con agua todo el año†a una altura de 250 metros sobre el nivel del mar, con una caÃda de agua de aproximadamente 50 metros, arriba hay más caÃdas. Vimos una especie de túnel que se forma entre las rocas, dicen que detrás de la cascada hay una cueva, como a 20 metros de la base y desde ese punto se puede divisar el paisaje en medio de la colgadura de agua.
El paisaje era increÃble, diferentes tonalidades de verde aparecÃan ante nuestros ojos, el chorro magnÃficamente grande, que nos dio miedo entrar al agua, pues no se veÃa el fondo, estaba turbio; Fanshi si se preparó y entró, nadó un poco, descansó en una gran piedra inalcanzable a nuestras manos, subió a otra y se tiró…salió del agua y lo hizo varias veces más.
Max siempre es «el loco», lo veÃamos dando vueltas, caminando de un lado a otro, saltando sobre las piedras, buscando no se qué y de repente lo vimos en la misma piedra donde se paraba Fanshi para saltar y lo hizo.
Estuvimos algún rato más allà y nos fuimos a Natá a comer algo, pero con la idea demasiado clara de que pronto volveremos  🙂