Habíamos visitado el lugar en época lluviosa y gracias a las fuerzas de la Naturaleza, nos fue bien. Ahora quisimos regresar a ver el lugar en época seca o de verano y valió la pena; el color del agua más clara, todo mucho más visible y un paisaje de película de ficción.



Lo único negativo fue la cantidad de personas que llegó al sitio después del mediodía, lo que al principio nos desconcertó. Al investigar, supimos que muchos eran locales en vacaciones escolares, y otros habían llegado por una publicación en Facebook. Lo peor: encontramos basura que tuvimos que recoger.
A pesar de eso, el lugar es espectacular. Recomendamos ir río arriba, donde pocos se atreven a llegar. Allí hay una cascada que me hizo sentir en un paraje celestial, sumergido por unos minutos en una libertad profunda. (Actualmente hay una entrada privada por este lado; en 2022 costaba $2 para acceder a las cascadas superiores).




Celebramos el cumpleaños de dos amigos y nos dispusimos a seguir disfrutando la tarde, desde el mirador de Cerro Gaital.
¡Feliz día de la amistad a todos! Sigamos conservando nuestros recursos naturales para que las futuras generaciones puedan disfrutar lo que ahora nosotros disfrutamos. Nada me encantaría más, que mi hijo pueda tener tan dichosa oportunidad en un futuro no muy lejano.